El Libro del Hombre

El adán, el esclavo, el hijo, el homosexual, el marido, el político, el sacerdote
Libros — También disponible en otros formatosLibro digitals (English)
Out of stock
Este libro contiene una selección de respuestas a preguntas que se formulan habitualmente hombres de las más diversas edades y procedencias.
Este libro contiene una selección de respuestas a preguntas que se formulan habitualmente hombres de las más diversas edades y procedencias.

El hombre de negocios
Soy un hombre de negocios. ¿Puedo ser también un meditador?

“HAY QUE hacer algo en la vida. Uno es carpintero, otro es rey, el tercero es un hombre de negocios y el cuarto soldado. Son maneras de ganarse la vida, son maneras de conseguir el sustento diario, el cobijo. No pueden cambiar tu ser interno. Que seas un soldado o un hombre de negocios no significa nada: uno elige una manera de ganarse la vida, el otro elige otra cosa. La meditación es la vida, no una forma de ganarse la vida. No tiene nada que ver con lo que haces, sino con lo que eres. Sí, los negocios no deberían de entrar en tu ser, eso es verdad. Si tu ser también se ha vuelto negociante, entonces es difícil meditar e imposible ser un buscador..., porque si tu ser se ha vuelto negociante, entonces te has vuelto demasiado calculador. Y una persona calculadora es una persona cobarde: piensa demasiado, no puede saltar. La meditación es un salto de la cabeza al corazón y por último, del corazón al ser. Cada vez profundizarás más, tendrás que ir dejando los cálculos atrás y la lógica dejará de tener importancia. Allí no puedes llevar la agudeza. De hecho, tu agudeza tampoco es verdadera inteligencia; la agudeza es un pobre sustituto de la inteligencia. La gente que no es inteligente aprende a ser lista. La gente que es inteligente no necesita ser lista: son inocentes, no necesitan ser astutos. Funcionan desde un estado de no saber. No hay nada malo en ser un hombre de negocios. Si Jesús puede convertirse en un meditador y en un buscador, y por último en un Cristo, en un Buda -siendo el hijo de un carpintero, que ayuda a su padre a traer la madera, a cortarla-; si el hijo de un carpintero puede convertirse en un Buda, ¿por qué no tú? Kabir era un tejedor. Trabajó durante toda su vida; siguió tejiendo incluso después de su iluminación. ¡Le gustaba! En muchas ocasiones sus discípulos le pidieron, le rogaron con lágrimas en los ojos: -No necesitas seguir trabajando; ¡estamos aquí para ocuparnos de ti! Con tantos discípulos y siendo un anciano, ¿por qué seguir hilando y tejiendo? Y Kabir dijo: -¿Pero sabéis para quién estoy tejiendo, para quién estoy hilando? ¡Para Dios! Porque, ahora, para mí todo el mundo es dios. Es mi manera de orar.” Osho.
More Information
Publisher GRIJALBO
ISBN 8425338093
ISBN-13 9788489897427
Number of Pages 235