Fama, fortuna y ambición
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«Quiero que seas rico en todos los aspectos posibles: material, psicológico, espiritual... Quiero que vivas la vida más rica que jamás se haya vivido en la tierra.» Osho
«Quiero que seas rico en todos los aspectos posibles: material, psicológico, espiritual... Quiero que vivas la vida más rica que jamás se haya vivido en la tierra.» Osho
Extracto de INTRODUCCIÓN
La gente siempre piensa que la hierba tiene que estar más verde al otro lado de la valla porque todo el mundo se ha distraído. Te han dicho que tomes direcciones que la naturaleza no había concebido para ti. No estás yendo hacia tu propio potencial. Estás intentando ser lo que otros han querido que seas, pero eso no puede ser satisfactorio. Entonces, la lógica dice: «Quizá no sea suficiente: debes tener más». Entonces vas a por más. Empiezas a mirar a tu alrededor y todo el mundo va por ahí con una máscara sonriente, con aspecto de felicidad, así que todo el mundo está engañando a todos los demás. Tú también llevas una máscara, y los demás piensan que eres más feliz que ellos. Y tú piensas que los demás son más felices que tú.
La hierba parece más verde al otro lado de la valla, sí, pero desde ambos lados. Los que viven al otro lado de la valla ven tu hierba más verde. Realmente parece más verde, más espesa, mejor. Es la illusion que crea la distancia. Cuando te acercas, empiezas a ver que no es así. Pero la gente mantiene las distancias. Los amigos, incluso los amantes, mantienen las distancias; demasiada cercanía puede ser peligrosa, podrían ver tu realidad.
Te han guiado mal desde el principio, así que hagas lo que hagas, seguirás siendo desdichado.
La naturaleza no sabe nada de dinero; de no ser así, los dólares crecerían en los árboles. La naturaleza no sabe nada de dinero, el dinero es una invención del hombre: útil pero también peligrosa. Ves a alguien con dinero y piensas que quizá el dinero traiga la dicha: fíjate en esa persona, parece muy dichosa: persigue el dinero. Alguien tiene más salud: persigue la salud. Alguien está haciendo otra cosa y parece muy contento: haz lo que él. Pero siempre es el otro, y la sociedad ha logrado que nunca pienses en tu propio potencial. Y toda la desdicha es porque no estás siendo tú mismo. Simplemente, sé tú mismo y, entonces, no hay desdicha, ni competición, ni preocupación, aunque los demás tengan más, aunque tú no tengas más.
Y si te gusta la hierba más verde, no hace falta que mires al otro lado de la valla; puedes hacer que tu hierba esté más verde. Conseguirlo es muy sencillo. Pero tú estás mirando a todos los demás céspedes, y todos están preciosos excepto el tuyo. Cada individuo ha de estar arraigado en su propio potencial, sea el que sea, y nadie debería guiarle, darle direcciones específicas. Deberían ayudarle, sin importar donde vaya, o lo que vaya a ser. Y el mundo estaría tan contento que no podrías ni creértelo. El mundo está en contra de la individualidad. Está en contra de algo tan simple como que seas tú. Quiere que seas un robot, y el haber aceptado serlo comporta dificultades. No eres un robot. Ésa no era la intención de la naturaleza. Así que, como no eres lo que se suponía que tenías que ser, lo que estabas destinado a ser, estás buscando constantemente: «¿Qué falta? Quizá un mobiliario mejor, mejores cortinas, una casa mejor, un esposo mejor, una esposa mejor, un empleo mejor...». Te pasas toda la vida intentándolo y corriendo de un lado para otro. Pero la sociedad te ha distraído desde el principio.
Mi tarea es traerte de regreso a ti mismo. Entonces, de repente, sentirás que todo ese descontento desaparece. No es necesario que seas más; eres suficiente. Todo el mundo es suficiente.
La hierba parece más verde al otro lado de la valla, sí, pero desde ambos lados. Los que viven al otro lado de la valla ven tu hierba más verde. Realmente parece más verde, más espesa, mejor. Es la illusion que crea la distancia. Cuando te acercas, empiezas a ver que no es así. Pero la gente mantiene las distancias. Los amigos, incluso los amantes, mantienen las distancias; demasiada cercanía puede ser peligrosa, podrían ver tu realidad.
Te han guiado mal desde el principio, así que hagas lo que hagas, seguirás siendo desdichado.
La naturaleza no sabe nada de dinero; de no ser así, los dólares crecerían en los árboles. La naturaleza no sabe nada de dinero, el dinero es una invención del hombre: útil pero también peligrosa. Ves a alguien con dinero y piensas que quizá el dinero traiga la dicha: fíjate en esa persona, parece muy dichosa: persigue el dinero. Alguien tiene más salud: persigue la salud. Alguien está haciendo otra cosa y parece muy contento: haz lo que él. Pero siempre es el otro, y la sociedad ha logrado que nunca pienses en tu propio potencial. Y toda la desdicha es porque no estás siendo tú mismo. Simplemente, sé tú mismo y, entonces, no hay desdicha, ni competición, ni preocupación, aunque los demás tengan más, aunque tú no tengas más.
Y si te gusta la hierba más verde, no hace falta que mires al otro lado de la valla; puedes hacer que tu hierba esté más verde. Conseguirlo es muy sencillo. Pero tú estás mirando a todos los demás céspedes, y todos están preciosos excepto el tuyo. Cada individuo ha de estar arraigado en su propio potencial, sea el que sea, y nadie debería guiarle, darle direcciones específicas. Deberían ayudarle, sin importar donde vaya, o lo que vaya a ser. Y el mundo estaría tan contento que no podrías ni creértelo. El mundo está en contra de la individualidad. Está en contra de algo tan simple como que seas tú. Quiere que seas un robot, y el haber aceptado serlo comporta dificultades. No eres un robot. Ésa no era la intención de la naturaleza. Así que, como no eres lo que se suponía que tenías que ser, lo que estabas destinado a ser, estás buscando constantemente: «¿Qué falta? Quizá un mobiliario mejor, mejores cortinas, una casa mejor, un esposo mejor, una esposa mejor, un empleo mejor...». Te pasas toda la vida intentándolo y corriendo de un lado para otro. Pero la sociedad te ha distraído desde el principio.
Mi tarea es traerte de regreso a ti mismo. Entonces, de repente, sentirás que todo ese descontento desaparece. No es necesario que seas más; eres suficiente. Todo el mundo es suficiente.
Type | Compilacion |
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Publisher | Debolsillo |
Number of Pages | 280 |
File Size | 1113 KB |
ASIN | B00WXJKA6U |
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